jueves, 25 de febrero de 2010

capitulo 4



Mientras que David, que se comporta como si estuviera en su casa, es llevado a una celda, Teodoro habla con sus hijos del amante de Alberto.
--¿puedes hacerlo...? Digo... ¿será fácil encontrar a ese maricón y meterlo en la casa? ¡¡han pasado años¡¡
--¿porqué no...? donde hubo fuego cenizas queda... --dice Teodoro con burla.
--¿y si él no quiere...?
--¡¡por favor... estamos hablando de maricones, no de gente normal¡¡ ¡hablamos de gente sin escrúpulos¡¡por dinero lo dejó, por dinero volverá...
--¡¡esto es demasiado... No se puede jugar con los sentimientos de Alberto¡¡
Javi se iba a ir pero Carlos amenazante le dice:
--si te vas olvida de compartir los beneficios...
Se queda pero no le gusta nada lo que planean su padre y su hermano. Además admira mucho a su hermano y no quiere quedar mal con él...

Por otro lado, Valentina se sienta en la cama de su amiga. No entiende el nerviosísima de esta. No sospecha que su marido está debajo de esa cama.
--¿que querías de el...?
--No me ha dado la cara... ¡¡tengo que saber qué pasó¡¡ ¡¡nos quedamos en la calle...¡
Vanessa siente pena de su amiga, le quiere y le duele que su marido se haya gastado el dinero en ella pero piensa que recibiéndola en su casa ya ha pagado su culpa.
--en la calle no estás... Me tienes a mí...
Valentina se levanta. Acaricia el pelo a su amiga:
--lo sé, tú eres una hermana para mí... Si no fuera por ti...
Valentina está muy dolida:
--¡¡Augusto me va a oír¡¡ ¡¡esta no se la paso...¡¡ ¡¡ya me ha echo de mil colores... creo que le tengo que poner un hasta aquí... a mi hija y a mí nos irá mejor sin él¡¡
--¿serías capaz de dejarlo?
--En este momento sí...
Si Vanessa no supiera que el hombre las está escuchando le animaría para que lo dejara. Augusto tiene que hacer un gran esfuerzo para no salir de su escondite. Está furioso.
--bueno, yo vuelvo a la cocina que dejé sola a MariTere.
Vanessa se siente más tranquila cuando su amiga se va. Cierra la puerta. Augusto sale de debajo de la cama. Da golpes a la pared furiosa:
--¡¡maldita zorra¡¡ ¡¡está loca si cree que me va a dejar...¡¡ ¡¡a mí nadie me deja...¡
--¿es que te crees que eres la guinda del pastel?¿después de lo que le hiciste es lo menos que te merece?
Augusto agarra del cuello a su amante:
--¡¡pobre de ti que me juegues sucio y que animes a Valentina a que me deje para quedarte conmigo¡¡
Vanessa lo tumba de una patada en los genitales. Augusto queda en el peso aguantándose sus partes bellas con dolor.
--¡¡maldita¡¡
--¡¡escúchame bien...¡¡ ¡¡tú eres un muerto de hambre, yo me voy a casar con un millonario...¡¡
Pese al dolor, con orgullo él dice:
--pero en la cama soy yo el que te excita...
Vanessa lo mira distante:
--eso no te lo voy a negar pero me importa un comino lo que hagas con tu vida... Fuera de esa cama no existe para mi...
Augusto la mira con desprecio:
--que zorra eres...
Y eso le encanta. La estrecha entre sus brazos. Ella trata de rechazarlo.
--¡¡a mi ninguna mujer me dice que no...¡
Él la besa a la fuerza y ella sucumbe a sus encantos. A él le gusta tenerla bajo sus dominios. Cuando ella está más fundida con él, Augusto se la saca de encima:
--¡¡ahora ya te puedes vestir...¡¡
Ella lo mira. Le molesta que siempre la humille.
--¡un día de estos te vas a quedar solo¡¡
Augusto sabe aprovechar tus encantos:
--sin mi no eres mujer...
Augusto se pone los pantalones.
--¡¡tú eres mía, que no se te olvide nunca¡¡ ¡¡mía y sólo mía¡¡
Vanessa se queda muy triste.
--¡¡¿¿porqué no puede alejarme de él?¿¿porqué?
Vanessa siente un profundo deseo hacia él, una atracción brutal. Abraza esas sábanas que huelen a él:
--es mi hombre él es mi hombre...

Javi está en la sala, solo. Se pone una copa
--¡¡que fuerte¡¡
El chico está muy impresionado por todo lo que ha descubierto. Lo que más le duele es el hecho que a su padre y a su hermano no le importe más que el dinero y por él estén dispuesto a pisar a cualquiera. Alberto baja las escaleras. Siempre sintió pena por él. Lo ve tan triste, Javi siempre pensó que era el dolor de la perdida de su esposa, y ahora que sabe la verdad lo mira con compasión aunque también se le hace raro saber que es gay. Siempre pensó que los gay era gente diferente, que eso se notaba y Alberto tiene aspecto de llevarse a la cama a cualquier mejor. No de ser gay. Mira fijamente a Alberto, no sé, trata de encontrar algo que sea una prueba de su homosexualidad pero no la encuentra. Alberto se da cuenta que su hermanastro lo mira como un bicho raro. Nunca se llevaron bien y le sorprende que le preste tanto atención.
--¿te pasa algo conmigo?
Aunque no quiere juzgarlo y condenarlo como han hecho todos pero la verdad es que le da un poco de miedo, le incomoda el saber que se ha acostado con un hombre.
--No, nada... Nada... ¿todo bien?
--si claro... como siempre...
Javi quiere hacer un esfuerzo para entenderlo, para acercarse a él. Le ve muy solo. Habla nervioso, balbucea.
--Yo sólo quería decirte que somos hermanos...
Alberto lo mira sorprendido porque jamás Javi se acercó a él:
--No, no lo somos... a solas no hace falta que sigamos con la farsa de los hermanitos... Tú sabes que pertenecemos a dos lados diferentes...
Javi le pone la mano en los hombros. Lo mira con pena. Le duele la faena que le van a hacer su padre y su hermano. Le duele saber que lo van a humillar, que se van a burlar de sus sentimientos. Le duele pensar que va a sufrir más de lo que ya ha sufrido y no se lo merece. Le gustaría advertirlo, decirle lo que le van a hacer para ahorrarle un nuevo dolor pero no se atreve.
--Yo sólo quiero que sepas que si necesitas un amigo, hablar con alguien... Estoy yo... Aunque tú no lo sientas así, somos hermanos...
Alberto se aparta de él. Lo mira sorprendido:
--gracias pero si necesito algo, tengo a mi hermano... Mi hermano de verdad...
--No bueno claro... pero a veces hay cosas que a los hermanos no se le cuentan, si necesitas hablar de algo...
Alberto no cree que su hermanastro sepa de sus tendenciales sexuales, está seguro que su madre sentía demasiada vergüenza como para hablar de eso que todos lucharon para ocultar.
--Me quieres decir algo? si es así dilo ya...
Javi no se atreve a decirle que sabe que es gay.
--No solo que me duele que pese a que somos hermanos desde hace mucho, yo de hecho siempre te recuerdo como mi hermano nos llevemos tan mal...
Alberto lo mira sorprendido.
--¿te sientes bien?
--si claro...
Alberto lo deja solo. Javi se toma unas copas. Está nervioso. Le pone nervioso que su hermanastro sea gay, le pone nervioso conocer que lo van a lastimar y no hacer nada para ayudarlo. Carlos se acerca a su hermano:
--¡¿¿¿que hacías con nuestra hermanita?¡ --dice burlón.
--Nada.
--¿es que quieres que se te pegue algo...? ya entiendo por eso no tienes novia... ¿es que te gusta?
--¡¡eso no lo digas ni en broma...¡¡ --dice Javi furioso.
--Ya tranquilo... sé que eres macho, la única mujercita de esta casa es la tal Alberta y me va a dar mucho justo echarlo dándole una patada en donde más le gusta que le den --dice Carlos riendo.
--No te da pena hacerle daño...?
--No porque es una maricona y está engañando a todo el mundo... No merece vivir con la gente normal como nosotros, respirar el mismo aire... deberían estar todos encerrados o mejor muerto...
A Javi le da horror como piensa su hermano:
--los tiempos cambian...
--A caso a ti te gusta vivir con un maricón...?
--bueno no pero no me meto en su vida...
--Si ya pues tu procura cerrar la puerta en la noche... No podremos vivir tranquilos hasta que la echemos,..
--¡¡llevamos 10 años viviendo con él...¡
--con lo caliente que está a lo mejor en las noches abusa de nosotros y ni nos enteramos... ¡¡como se pase conmigo la mato...¡
--túestás tonto...
Carlos abraza a su hermano:
--¡¡ya olvidemos a nuestra hermanita --con desprecio-- me caso... me voy a casar mi pronto...¡
--Vanessa ya lo sabe...?
--lo sabrá hoy...
--¿y no te molesta casarte con una chica que solo quiere tu dinero...?
--¡¡pero qué dices...¡¡¡ ¡¡Vanessa está loca por mi, soy su macho...el resto le da igual... Y en 9 meses tendremos otro macho en la casa y además toda una herencia...
--pero a que precio? --dice Javi descontento.
--¡¡solo importa el dinero no los métodos¡
Aunque le gusta el dinero, Javi no está dispuesto a todo por conseguirlo.

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